Realización de auditorías energéticas y emisión de certificados energéticos.
Las medidas a adoptar para el ahorro en la factura de la luz no deben ceñirse exclusivamente a la reducción de la energía consumida procedente de la red sino que se ha de prestar una especial atención al consumo racional y eficiente de esta energía sea cual sea su procedencia.
La eficiencia energética es un concepto asociado a un consumo mínimo de energía conservando las características y confort ofrecido por un equipo o electrodoméstico. Es alrededor de este concepto que se producen importantes inversiones en I+D+i para el desarrollo y comercialización de equipos eficientes y que surgen clasificaciones energéticas para gran parte de los equipos domésticos (A++, A+, A. B, C, D,…) orientadas a informar a los consumidores de la mayor o menor calidad de estos en términos medioambientales y de ahorro.
La utilización de estos equipos unido a una gestión racional de su funcionamiento podrán suponer reducciones importantes en nuestro gasto en energía y debería ser el paso previo a la instalación de un sistema de autoconsumo.
Siempre resultará imprescindible un estudio personalizado y detallado de las cargas/consumos y sus tiempos de funcionamiento previos a cualquier propuesta que pudiera hacerse en este sentido.